Cuando se trata de elegir ventanas para nuestro hogar o lugar de trabajo, la eficiencia energética y el confort suelen ser dos de las principales preocupaciones. Una de las mejores soluciones modernas para abordar ambos aspectos es la ventana doble. Pero, ¿qué hace que estas ventanas sean tan especiales y cómo pueden beneficiar tu espacio?.
¿Qué es una doble ventana?
Una doble ventana se refiere a una configuración donde dos ventanas independientes se instalan secuencialmente, una detrás de la otra, en lugar de una sola. Estas ventanas pueden tener un espacio entre ellas, lo que crea una cámara de aire. Esta configuración es diferente de las ventanas de doble acristalamiento, donde dos láminas de vidrio están separadas por un espacio o gas inerte en una sola unidad.
Este tipo de ventanas no solo mejoran el aislamiento térmico, sino que también son efectivas en el aislamiento acústico, creando ambientes mucho más tranquilos y confortables.
Es importante notar que mientras las dobles ventanas ofrecen ventajas, la tecnología de ventanas de doble acristalamiento (o incluso triple acristalamiento) ha avanzado significativamente y suele ofrecer un mejor rendimiento en términos de aislamiento térmico y acústico en un diseño más compacto. Sin embargo, en algunos edificios históricos o en ciertas circunstancias, la opción de doble ventana puede ser más viable o preferible.
Beneficios de las dobles ventanas
Las dobles ventanas, aunque a menudo se confunden con las ventanas de doble acristalamiento, se refieren a la instalación de una segunda ventana independiente detrás o delante de una ventana existente. Este diseño crea una cámara de aire entre ambas ventanas, lo que conlleva varios beneficios. A continuación, te presentamos los beneficios de las dobles ventanas.
Eficiencia energética
Las ventanas dobles actúan como barreras térmicas, reduciendo la necesidad de calentar o enfriar excesivamente los espacios interiores. Esto se traduce en menos consumo de energía y, por tanto, en facturas de electricidad y calefacción más bajas. Durante el invierno, esta barrera ayuda a mantener el calor dentro del hogar, mientras que en verano reduce la entrada de calor desde el exterior.
Además, las corrientes de aire no deseadas pueden ser una fuente importante de pérdida de calor en una vivienda. La instalación de una doble ventana puede reducir significativamente estas corrientes, especialmente si la ventana original tiene filtraciones.
Reducción de la condensación
Las dobles ventanas pueden ayudar a reducir la condensación en el vidrio interior, ya que la ventana interior mantiene una temperatura más cercana a la del ambiente interno, evitando que el aire húmedo se condense sobre ella. También, vale la pena mencionar que la cámara de aire entre las dos ventanas también actúa como una barrera contra el ruido, lo que puede mejorar la comodidad en zonas ruidosas.
Flexibilidad en el control climático
Las dobles ventanas permiten una flexibilidad en el control climático. Por ejemplo, puedes abrir la ventana exterior para ventilación mientras mantienes cerrada la ventana interior, conservando de esta manera el calor o el frío según la estación. Por otro lado, al consumir menos energía para la calefacción y la refrigeración, reducimos nuestra huella de carbono y contribuimos a un medio ambiente más sostenible.
Reducción de ruido
Si vives en una zona ruidosa, las ventanas dobles pueden ser tu salvación. El espacio entre los dos vidrios actúa como un amortiguador, disminuyendo notablemente la transmisión de sonido.
Mayor seguridad
Dos paneles de vidrio son más difíciles de romper que uno. Esto ofrece una seguridad adicional contra posibles intrusos o accidentes.
¿Son adecuadas para ti?
Si estás considerando renovar o instalar nuevas ventanas, las ventanas dobles son una inversión inteligente a largo plazo. Aunque su coste inicial puede ser ligeramente superior al de las ventanas tradicionales, los ahorros en facturas de energía y el aumento del confort y la seguridad las convierten en una elección ganadora.
¿Doble ventana o doble acristalamiento?
La elección entre doble ventana y doble acristalamiento depende de varios factores, incluidas las necesidades específicas del espacio, el presupuesto y las preferencias estéticas. Ambas opciones tienen sus ventajas y desventajas. A continuación, te proporcionamos una comparación entre ambas opciones.
Al tener dos ventanas, es posible abrir una mientras la otra permanece cerrada, permitiendo la ventilación sin comprometer demasiado el aislamiento o la seguridad. En edificios antiguos o históricos, a menudo es más apropiado (y en algunos lugares, reglamentario) mantener las ventanas originales. Añadir una segunda ventana en el interior conserva la estética exterior mientras mejora el aislamiento.
Por el contrario las dobles ventanas requieren más espacio que una ventana de doble acristalamiento. También hay que tener presente que puede ser más laborioso mantener dos ventanas en lugar de una.
Por lo que respecta a las ventanas de doble acristalamiento son conocidas por su capacidad de aislar térmicamente. El espacio entre los vidrios, a menudo lleno de gas inerte como el argón, minimiza la transferencia de calor, lo que puede resultar en ahorros significativos en facturas de calefacción y refrigeración.
También ofrecen una buena reducción del ruido, aunque la eficacia puede variar según el tipo y la calidad del acristalamiento. Reducen la probabilidad de condensación en el vidrio interior, ya que la cara interna del vidrio está mejor aislada del frío exterior.
Entre las desventajas encontramos que la instalación inicial puede ser más cara que mantener ventanas simples, aunque este costo se puede recuperar a largo plazo en ahorros de energía. Por otra parte, si uno de los paneles se rompe o si el sellado falla (lo que puede causar empañamiento entre los paneles), a menudo es necesario reemplazar toda la unidad.
Doble ventana de PVC, una apuesta segura
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